Tal día como hoy hace 30 años, el 6 de febrero de 1995, Arantxa Sánchez Vicario se convertía en la primera tenista española en la historia que alcanzaba el Nº 1 mundial, puesto que ostentó durante 12 semanas.
Con 23 años y casi dos meses, la barcelonesa era la sexta jugadora de la “Era Open” que llegaba a lo más alto del ranking mundial establecido en 1975, la tercera europea tras la alemana Steffi Graff y la yugoslava Monica Seles.
“He perseguido este sueño desde que comencé a jugar a tenis, siempre a base de sacrificio y trabajo. Es algo que me he ganado a pulso”, afirmó tras confirmarse la noticia.
Ese día, entre multitud de llamadas y felicitaciones, recibió la visita del futbolista Hristo Stoichkov, quien le llevó un ramo de flores.
Campeona del Mundo de 1994
Semanas antes, Arantxa Sánchez había sido proclamada Campeona del Mundo de 1994 después de una gran temporada en la que conquistaba su segundo título de Roland Garros y el primero del US Open.
La barcelonesa, ya había hecho historia ganando el primer título individual femenino de Grand Slam para el tenis español en Roland Garros 1989, y siendo la campeona más joven con 17 años y 11 meses.
También alcanzando el Nº 1 mundial de dobles el 19 de octubre de 1992. En este caso, durante 111 semanas.
Pionera en la cima
Los primeros puntos los lograba en 1986, tras llegar a las semifinales de los Campeonatos Internacionales de España celebrados en Barcelona, donde jugó con una invitación.
Su éxito abrió el camino para el tenis español, que ya había contado con Manolo Santana como número uno mundial oficioso en 1966. Posteriormente llegaron los de Carlos Moyá (1999), Juan Carlos Ferrero (2003), Rafael Nadal (2008), Garbiñe Muguruza (2017) y Carlos Alcaraz (2022).
Foto: @Sergio Carmona/RFET.