Rafael Nadal se ha visto superado por el suizo Roger Federer en la final del torneo indoor de Basilea en un partido resuelto para el jugador local en tres sets por 6-3 5-7 6-3. A pesar de la derrota, el mallorquín recupera un puesto en el ranking mundial y se sitúa en el nº 6 por delante del japonés Kei Nishikori.
Hacía 21 meses que los dos grandes dominadores del tenis mundial de la última década no se reencontraban en una pista de tenis, desde las semifinales del Open de Australia del pasado año con triunfo entonces para Nadal. El español sigue dominando los enfrentamientos directos por 23-11.
“Mi objetivo es volver a mi nivel y ser competitivo contra los mejores jugadores otra vez, y hoy he sido muy competitivo contra uno de los mejores del mundo. El partido no lo he tenido tan lejos, él ha jugado realmente bien”, ha analizado un Nadal satisfecho por la evolución de su juego. “Tengo muchas cosas buenas de mi juego y mi mentalidad que llevarme de esta semana”.
La final en Basilea ha sido la sexta del año para el balear, campeón de tres torneos en Buenos Aires, Stuttgart y Hamburgo, donde se situó en solitario como quinto jugador de la Era Open más laureado con 67 títulos. Ha sido también finalista en el Masters 1000 de Madrid y Beijing.
En Suiza, superó en las semifinales al francés Richard Gasquet 6-4 7-6(7), y en cuartos al croata Marin Cilic 4-6 6-3 6-3. En las rondas anteriores había vencido al búlgaro Grigor Dimitrov 6-4 4-6 6-3 y al checo Lukas Rosol 1-6 7-5 7-6(4).
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